El Decreto de Necesidad y Urgencia que desregula la economía y rompe con derechos individuales y colectivos ya fue judicializado. El Observatorio del Derecho a la Ciudad, la CTA Autónoma y ATE presentaron un amparo por considerarlo inconstitucional, en tanto constituye un ejercicio de facultades extraordinarias equivalentes a la suma del poder público. En efecto, estamos frente a la configuración de la prohibición plasmada en el artículo 29 de la Constitución Nacional originaria de 1853, que castiga con la pena de ‘’infames traidores a la patria” a todos aquellos funcionarios que consientan el otorgamiento de “facultades extraordinarias” o “la suma del poder público” otorgando “sumisiones o supremacías por las que la vida, el honor o las fortunas de los argentinos queden a merced de gobiernos o persona alguna”.
Por su parte, Milei defendió el decreto que, según su parecer, “busca incrementar el bienestar de las personas” y anticipó que se anunciarían más reformas en estos días. Sus declaraciones no faltan del todo a la verdad, pues podemos identificar fácilmente nombres y apellidos de quienes se van a ver directa y ampliamente beneficiados por este paquete de medidas. Ya lo decía Leandro Santoro en una entrevista: “más que un decreto es un plan de negocios” que atropella los métodos democráticos republicanos y la división de poderes.
Entretanto, ayer por la tarde y noche continuaron las concentraciones en distintos puntos del país para reclamar la nulidad del DNU. En Córdoba la Policía reprimió a los manifestantes, cinco de los cuales permanecen aún detenidos. Hoy la Asociación de Trabajadores del Estado marchará hacia la Jefatura de Gabinete de Ministros como parte de una jornada de lucha. En tanto, la CTA Autónoma junto a organizaciones populares llevarán adelante una jornada de asambleas y ollas populares a lo largo del país en reclamo de “una urgente convocatoria al Consejo del Salario Mínimo, Vital y Móvil”. El miércoles se espera la multitudinaria marcha convocada por la CGT a Tribunales en respuesta a la reforma laboral propuesta en el DNU.
Evidentemente, el perverso protocolo de seguridad de Bullrich que pretende prohibir las protestas en las calles no amedrentó a cientos de ciudadanos y ciudadanas que ven con alarma el atropello de sus derechos y de la vida democrática. La reacción popular ante el decreto fue inmediata, como si se actualizara en el acto una memoria de resistencia y lucha en las calles. Las movilizaciones populares de estos días no frenarán por sí mismas la embestida del Ejecutivo, pero sí empiezan a conformar un clima social que va delineando su forma en las acciones y determinaciones de sindicatos, partidos políticos y organizaciones populares; un clima que se aleja del malestar individual para, ojalá, traccionar un hacer colectivo.
Quizás algo de esto traiga la carta del día: el As de copas que refiere a un nuevo comienzo o nueva etapa emocional, afectiva e incluso creativa. Puede tratarse entonces del fortalecimiento de relaciones existentes o del establecimiento de nuevos caminos satisfactorios. Frente al neoliberalismo salvaje que nos proponen, sólo las formas colectivas de organización y ayuda mutua pueden abrir huella y ensanchar el sendero. Tenemos herramientas y el conocimiento de cómo hacerlo.